Los vivos de siempre...

Ojalá esta fuera una entrada dedicada a los albores de la vida y un análisis profundo de la misma; ¿por qué existo? ¿quién soy y ¿adónde voy? sin embargo no se trata de nada de esto, se trata de un llamado de atención, de un alerta, un grito desesperado contra la viveza criolla, mal llamada viveza, porque resulta que el vivo no espera, atropella al otro, abusa y ese es su real nombre: abusador criollo, en todas sus versiones, niños, jóvenes, viejos, mujeres, etc.    el que se colea, la que se va al banco o hacer cualquier cosa y le deja todo el trabajo a los compañeros, el  que le deja los cuatro muchachitos a la abuela de 90 años porque no quiere pagar guardería, el que llega tarde y se va temprano, el que agotó las excusas para no hacerse cargo de su vida, el que le echa la culpa a los demás, la que va a darse golpes de pecho en la iglesia pero al salir critica a todo el que puede, al que aturde con su música a las 4:00am, al vivito que no le deja ni una cotufa a sus compañeros, o se lleva casi todos los jugeuetes de la piñata, y ni hablar del que no respeta ni la constitución, expropia,  secuestra los poderes, acumula y monopoliza todo un Estado; basta de esto, que se nos reconozca por nuestra tesón, nuestra alegría, nuestras ganas de emprender,  pero basta de la viveza criolla;  y sólo cada uno de nosotros podemos hacer cargo, es más fácil echarle la culpa a los demás, difícil es encargarse de nuestra propia vida, y a mi me gusta lo difícil...